Al vender una vivienda, sobre todo si está en un edificio antiguo, muchos propietarios se preguntan si es necesario contar con la Inspección Técnica de Edificios (ITE).Este trámite, regulado por las normas municipales y autonómicas, garantiza que los inmuebles estén en buenas condiciones de seguridad, estabilidad y salubridad.
En este artículo explicamos cuándo es obligatoria la ITE, quién debe asumirla y cómo puede influir en la compraventa.
¿Qué es la ITE y para qué sirve?
La Inspección Técnica de Edificios (ITE) es una revisión periódica que deben pasar los edificios con cierta antigüedad. Sirve para comprobar su estado de conservación y detectar fallos que puedan afectar a la seguridad o al mantenimiento.
En la mayoría de los municipios, los edificios deben pasar la ITE cuando cumplen entre 30 y 50 años, según la normativa local. Tras la inspección, el técnico emite un informe que describe el estado del edificio y, si es necesario, las reparaciones que deben hacerse.
¿Es obligatoria para vender una vivienda?
Sí, puede serlo, pero depende de la edad del edificio y de lo que exija el ayuntamiento. Si el inmueble ya ha alcanzado la antigüedad obligatoria, será necesario contar con un informe favorable antes de formalizar la venta. A través de este informe se asegura que el edificio cumple con los mínimos de seguridad y estabilidad, lo que da confianza al comprador y protege al vendedor.
¿Quién debe encargarse de realizar la ITE?
La comunidad de propietarios es la responsable de tramitar y pagar la ITE, no un solo vecino. El técnico, normalmente un arquitecto o aparejador, revisa el edificio y entrega el informe.
En el caso de que un propietario quiera vender y la ITE aún no se ha hecho, debe consultar al administrador o al presidente de la comunidad. Y, si el trámite está pendiente, la comunidad es quien debe gestionarlo.

¿Qué ocurre si la ITE es desfavorable?
Una ITE desfavorable no impide la venta, pero puede afectar al valor del inmueble y generar dudas en los compradores.
El nuevo propietario deberá asumir las obras de reparación obligatorias, por lo que es habitual que esta situación se refleje en el precio o en las condiciones de la compraventa.
Por ello, se recomienda actuar con transparencia y entregar el informe técnico actualizado, ya que aporta seguridad jurídica a ambas partes.
Caso de ITE desfavorable con reparaciones hechas
Si la inspección fue desfavorable, pero ya se realizaron las obras, conviene entregar los siguientes documentos:
- Facturas o certificados de los trabajos realizados.
 - Informe de subsanación del técnico, que confirme que los defectos fueron corregidos.
 
Aportar esta información demuestra transparencia y da garantías frente a posibles reclamaciones.
Consejos para quienes quieren vende

¿Qué documentos relacionados con la ITE se deben entregar al comprador?
Si la ITE es obligatoria y ya se pasó la inspección, el vendedor debe dar al comprador:
- Una copia del informe favorable del técnico.
 - Si corresponde, el registro municipal del informe.
 
En algunos ayuntamientos, esta información se incluye en un registro público de edificios, disponible en línea.

La ITE al vender una vivienda es un trámite esencial en edificios antiguos, ya que garantiza la seguridad y el buen estado del inmueble. Aunque no siempre es obligatoria, anticiparse a la inspección puede evitar retrasos o complicaciones durante la compraventa.
Contar con un informe favorable no solo es un requisito legal en muchos municipios, sino también un valor añadido que aporta tranquilidad tanto al vendedor como al comprador.
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